jueves, 10 de enero de 2013

CALLE DEL 31 DE AGOSTO, ANTES DE LA TRINIDAD

Hay referencias de la Calle de la Trinidad en el padrón de 1566 y en las Ordenanzas de 1630.

En esta calle se hallaban edificios tan importantes como las dos parroquias de Santa María y San Vicente, el Convento de Religiosas de Santa Teresa, Convento de San Telmo, Colegio de la Compañía de Jesús y la Cárcel pública y algunas casas particulares de bastante capacidad y buena forma.

Tenía la calle algunas tortuosidades parciales que le privaban de hermosura, y su anchura variaba de 20 ó 30 pies.Su pavimento desde la torre del campanario, punto el más elevado de la colina, bajaba en descenso suave hasta encontrar la rampa de la subida al Castillo, en el ángulo de la iglesia de Santa María y la escalinata que se hallaba en él, de donde descendía al atrio de dicha iglesia, y desde este punto a la calle por otra escalinata menor. En tiempo de aguas, se reunían en gran cantidad en esta calle, y a veces ocurría que se obstruía la boca del caño de la rampa del Castillo, y el torrente de aguas engrosadas con las tierras, bajaba por las escalinatas indicadas y entraba en la iglesia, causando grandes daños.

Con estas escalinatas, quedaba interrumpida la comunicación con la Calle Mayor, y los transportes del muelle tenían que dar una gran vuelta para llegar a la parte alta de dicha calle.

Se libraron del incendio todas las casas de la acera del lado del Castillo, en donde se acuartelaron las tropas portuguesas al entrar en la plaza, ero se quemaron todas las de la acera de enfrente, buenas en general, llenándose la calle de escombros, y hubo que derribar las paredes que quedaron en pie por evitar desgracias.

Esta calle al ocurrir el incendio de 1813, principiaba en la calle de la Zurriola, por el costado de la iglesia de San Vicente y terminaba en el atrio de la torre del campanario de Santa María. Pero no hay duda alguna que en tiempos antiguos no estaba limitada esta calle a las dimensiones que tenía en 1813, como se deduce del padrón de 1566. En este documento, con referencia a esta vía se dice : "Trinidad alrededor de la villa", y también "Trinidad a la redonda". En cambio no figuraban en dicho padrón las calles del Campanario, Ingente, Pozo, San Juan ni otras varias. ¿Se englobarían con aquel nombre algunas de ellas?.

Otro dato tenemos para creer en la mucha extensión de esta vía en aquel tiempo. Y es que de los 466 vecinos que aparecen en dicho padrón, en la fecha indicada, 155 corresponden a esta calle; es decir la tercera parte del vecindario.

En tiempos más próximos a los nuestros, debía suceder lo mismo, pues solo así se comprende que los números con que estaban señaladas las casas cuando ocurrió el incendio de 1813, comenzaran en el 198 para terminar en el 238, que llevaba la casa inmediata al atrio de Santa María. Es de lamentar que nadie nos haya dicho donde tenía su principio esta numeración y donde el fin, pues es posible que continuase más adelante del atrio en alguna otra dirección.

Se ha dicho oficial y particularmente, que esta calle se llamaba de la Trinidad, por la circunstancia de que en ella se hallaban enclavadas las tres iglesias de Santa María,San Vicente y la del Convento de San Telmo. Sin embargo, esto no resulta cierto, por la sencilla razón de que antes de edificar el convento, existía ya la calle de este nombre. Ya se sabe por otra parte, que las iglesias de Santa Teresa y la de la Compañía de Jesús, se levantaron más tarde y no pudieron por tanto contribuir a la adopción de aquel nombre. Nos parece más verosímil que se llamara así, porque hubiera en dicha calle una efigie de la Santísima Trinidad.

Era tan frecuente en tiempos pasados el poner efigies de Santos en las entradas de calles y plazas y en otros lugares públicos, que no deben extrañarse nuestros lectores de que atribuyamos a esta pía costumbre la existencia de esta clase de nombres. Con motivo de cualquier cataclismo público, un incendio, una epidemia, inundaciones, etc., se hacían votos y se ponían efigies de Santos al público, y en muchos casos sin más causa que la devoción particular. Al contacto de la muralla del Mediodía hemos visto que había el baluarte de San Felipe y el de Santiago y el cuartel de San Roque. Frente al Cubo el Hornabeque de San Carlos. Aún existe en Santa María, la imagen de Cristo Crucificado, que se ostentaba en la puerta de entrada de la Plaza Vieja hasta el derribo de las murallas.

Se sabe que existía la efigie de Nuestra Señora de la Piedad en la casa que hace esquina a las calles de Narrica y de Embeltrán. La de San Jerónimo en el arco que daba acceso a la calle de este nombre. El arco de Santiago se tituló así por la imagen del Patrón de España que figuraba en él. Además existían hasta el año 1848 a 1859, una imagen de San Ignacio de Loyola y otra de Nuestra Señora de Méjico en el cuartelillo en que estuvieron las escuelas públicas.

En sesión de 26 de Septiembre de 1877, el teniente alcalde Sr. Echeverría, propuso que la Calle de la Trinidad, que ya no respondía a su significación por haber desaparecido de ella la iglesia de San Telmo, podía llamarse en adelante "Calle del 31 de Agosto", en conmemoración del acontecimiento de aquella fecha y por ser la única que se salvó. Así se acordó, y desde entonces lleva el nombre actual .

Por acuerdo del 13 de Abril de 1897, se la rotuló también, San Telmo-Kalea, que significa "Calle de San Telmo".

Uno de los callejones que daba acceso al punto en donde se levantó el Convento de San Telmo, se denominaba "Calle de Santa Corda" por el año 1516.



(D. SERAPIO MÚGICA - "Las calles de San Sebastián. Explicación de sus nombres")